jueves, 19 de enero de 2012

ESPACIO...


Está claro que tener un espacio para juegos y maldades es imprescindible, aunque sea lo mínimo, sea algo que simplemente ocupas alquilandolo o por horas, pero que durante ese tiempo sea tuyo y sea para jugar, disfrutar y desconectar de todo y todos.

Ya sabemos  que a la gran mayoría de seguidores de BDSM se les hace la boca agua si hablamos de mazmorras o sótanos, incluso si en algún momento te dicen cruces o cepos, empiezas a insalivar, no soy yo sola, no?
Pero realmente nos las arreglamos con mucho menos, una habitación o un salón si hay suerte, si aun puedes presumir de fortuna, hablas de vigas o maderas para suspender, incluso puedes decir que la ducha es grande, grande... pero eso no es lo habitual.

Así que, la imaginación al poder, a veces hay que plantearse si la cena es de rol (aunque solo lo sepas tu) y como incordiar o no dejar que se alimente con calma y así esté desquiciada y deseando contestar, pero las miradas ganan y se provocan silencios. Aunque no sepa por que, aunque no entienda la sonrisa, siempre está la obediencia, el no ser sumisa, pero serlo, vaya a ser que...

Puedes disfrutar de preguntar, con la mejor voz melosa y dulce que tengas y en bajo, para que no lo oiga nadie mas que vosotros dos: ¿Gato o fusta? y ver la incertidumbre en la cara, ver que no termina de entender que ha sido eso y de pronto... el brillo de la mirada y la voz que contesta: gato... no fusta... no gato... ¿Y eso por que???? Por que si, porque quiero... y ya no hay discusiones y la cena es calmada y rápida, muy rápida...

O puedes hacer un recorrido turístico por la ciudad que tengas mas a mano y que su ropa este en el asiento de atrás... y el coche de la policía al lado en el semáforo...

Puedes visitar cualquier comercio, cualquier centro comercial y pasar, rozar, provocar, susurrar... ni los probadores estan a prueba de maldades...

Se pueden hacer mil cosas, siempre que lo que busques no sea solo el aquí te pillo aquí te mato. Que lo que pretendas sea alargar la maldad, el deseo y tener el control de la situación, del desenlace, buscar la ocasión a un mordisco o a un beso... si al final lo que menos importa es el donde, sino el cuando...

Un saludo

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